Ante la amenaza imperialista es urgente producir nuestros alimentos.

Nuestros niños y niñas del campo y la 

ciudad  merecen un mejor país, 

solo con la  alianza del obrero y el 

campesino y la unidad para la 

construcción del socialismo 

otro mundo es posible.

En los últimos días se ha profundizado la amenaza imperialista contra nuestro país, la política del gobierno de los Estados Unidos ha arreciado y se ha hecho más clara; tratar de dañar la economía Venezolana para arrodillar el proceso bolivariano. 


No es nada extraño que esto sea así, siempre la dominación imperialista ha tenido en la economía un factor esencial, luego viene la manipulación propagandística y después la agresión militar, su plan es crear una matriz con el proceso bolivariano y contra el presidente Chávez, hablan de terrorismo, narcotráfico, falta de democracia, para tratar de justificar ante la opinión publica y mundial la agresión que preparan contra nosotros. 

Consideramos que estamos a tiempo para evitar el impacto nefasto de esta política imperialista, podemos aun, pero de manera urgente, profundizar los planes de producción agrícola que permitan abastecernos de los alimentos básicos para resistir el impacto de esta nueva ofensiva. 

Se hace necesario tomar medidas de estímulo a la producción, en especial de alimentos, para generar la activación de las fuerzas productivas, será necesario tecnificar e industrializar el campo, crear centros industriales en las zonas rurales, esta demanda de fuerza de trabajo generará una emigración hacia esos centros que demandan mano de obra, comenzaremos a luchar contra las diferencias campo - ciudad, habrá que educar en labores agrícolas a millones de personas, movilizar ejércitos de trabajadores, estudiantes, amas de casa al campo para sembrar y recoger cosechas, solo así empezaremos a entrar al reino de la abundancia, que se inicia con la abundancia de los alimentos. 

En lugar de dejarnos chantajear por la burguesía, la derrotaremos con una movilización de todos los ciudadanos que creen en su país y que nunca han recibido una verdadera oportunidad de demostrar sus conocimientos y capacidades, comenzará una etapa de desarrollo de la industria liviana, acompañada de planes de expansión de la industria pesada para producir en el futuro próximo maquinarias de todo tipo e insumos para todas las ramas industriales: el hierro, aluminio, plástico, son elementos básicos para esto y lo tenemos en abundancia, tenemos energía; petróleo, gas, carbón, hidroeléctrica, eólica, pero lo mejor aún somos una población joven, instruida y con un alto espíritu patrio y revolucionario. ¿Que esperamos? No desperdiciemos esta oportunidad.

Autor: Pedro F. Rosas.