lunes, 1 de julio de 2013

Análisis Marxista del Campesinado.

Campesinos trabajando la agricultura
El campesino pobre latinoamericano ha sido utilizado por el liberalismo y el conservadurismo como generador de conflicto para la usurpación de tierras a los indios, contribuyendo a deteriorar reservas forestales protectoras de el agua. En ese devenir histórico ha pasado de ser un nómada peón a esclavo asalariado y en algunos casos a delincuente y guerrillero por la presión del capitalismo. El campesino pobre latinoamericano se ubica en la clase desheredada que más ha sufrido injusticias.

Si nos trasladamos por ejemplo a finales del siglo XVIII vemos como en Sur América se han arrinconado pueblos campesinos hacia la pobreza como ocurre con Paraguay en la expansión liberal en Brasil, Argentina y Uruguay a finales del siglo XVIII.


El escritor y político José Hernandez (1834 - 1896) en algunos fragmentos de Martín Fierro nos comenta situaciones de injusticia que se reflejan en el campesino pobre  (nómada, sin tierra).

Siempre cubiertos de harapos,
Siempre desnudos y pobres,
Nunca le pagas un cobre,
Ni le das jamás un trapo,

La gente vive marchita,
Si viera cuando hechan tropa,
Les vuela a todas la ropa,
Que parecen  banderitas,

De todos modos lo cargan,
Y al cabo de tanto andar,
Cuando lo largan, lo largan,
Como pa echarse a la mar,

Si alguna prenda le han de dar,
Se la vuelven a quitar,
Poncho, caballo recao,
Todo tiene que dejar.

Se tratan como a un infiel,
Completan su sacrificio,
No dándole ni un papel,
Que acredite su servicio

Y tiene que regresar,
Más pobre de lo que fué,
Por supuesto a la mercé,
Del que lo quiere agarrar,

Y luego, si a alguna estancia,
A pedir carne se arrima,
Al punto le caen encima,
Con la ley de la vagancia

Y digo aunque no me cuadre,
Decir lo que nadie dijo,
La provincia es una madre que no defiende a sus hijos

Mueren en alguna loma,
En defensa de la ley,
O andan lo menos que un guey,
Arando pa' que otros coman

Y he de decir ansi mismo,
Porque de adentro me brota,
Que no tiene patriotismo,
Quien no cuida al compatriota

Y si canto de este modo,
Por encontrarlo oportuno,
No es para el mal de ninguno,
Sino para el bien de todos.

La motivación que nos da la poesía, nos muestra la importancia del arte como trinchera para la revolución.

La presión del capitalismo agrario ha expropiado al campesino pobre hasta convertirlo en un asalariado del campo. En el 96 decreció la mano de obra campesina  en el mundo 14%. El 7% (1960000 personas) de los 28 millones de Venezolanos viven en la zona rural (campesinado pobre, pequeños y medianos productores, proletariado agrícola, burguesía terrateniente).

Entre 1950 - 1960 ocurre monopolización capitalista de sectores estratégicos como es la agricultura presentándose en algunos países de América desarrollo de fuerzas productivas del agro. Se incrementó la tecnología (genética, fertilizantes, manejo de suelos, maquinaria). Entre 1970 y 2000 se duplica el producto agrícola mundial. Hoy baja a un 62% la desnutrición infantil. 

Incremento % entre 1961 y 2005
Rubro
P. Indep. Mundo
P. Depend.
Cereales
2,2% / año
2,8% anual
Oleaginosas
4,0% / año
4,4% anual
Carnes
3,0% / año
4,8% anual
Leche
1,4% / año
3,2% anual

A los campesinos se les ha implantado un patrón tecnológico neoliberal altamente dependiente y de altísimos costos, impulsado por las grandes transnacionales como Monsanto, Bayer, etc. Se ha presentado una transculturización desatendiendo el acceso a los servicios públicos como sanidad ambiental, vialidad, salud, educación, uso de agrotoxicos, desalojos, desplazamiento forzado, represiones, asesinatos por sicarios (220 victimas del fascismo, mano opresora del capitalismo).

Se plantea la necesidad de impulsar el desarrollo tecnológico (saberes ancestrales, agricultura orgánica  diversificación de rubros, organizar banco de semillas y padrotes genéticos  organizar centros de acopio locales, planificar producción en función del consumo, etc), Y cohesionar y organizar fuerzas dispersas en una ideología bolivariana unitaria para la defensa de la patria, partiendo de la constitución de Consejos campesinos locales y regionales que se articulen con el Consejo Superior  de Seguridad Alimentaria.

Estamos en un proceso de agrupamiento de fuerzas, razón por la cual sin perder visión de la unidad, debemos desenmascarar la arremetida fascista cuyos golpes bajos y traicioneros originan cizaña y división para luego atraer hacia ellos a los pseudobolivarianos que bailan al son que toca la oposición. 

Compatriotas seamos autocriticos para corregir nuestros errores, y olvidándonos de la actuación de estos pseudobolivarianos, sigamos nuestro camino de unidad, organización y lucha teniendo en cuenta los lineamientos marxistas - leninistas.


Gayones del Campo Lara.

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